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Viaje a Kreisau en septiembre 2017

En septiembre 2017 se realizó el vigésimo viaje de nuestro colegio a Polonia, que nos llevó al pequeño pueblo de Kreisau (que hoy en día es polaco se llama Krzyżwoa), el cual tiene 250 habitantes y está a 80 kilómetros al sur de Wrocław (antes Breslavia).

¿Qué tiene de especial este pueblo? Opino que una antigua ministra de Cultura y Patrimonio nacional polaca, la Sra. Prof. Malgorzata Omilawonska, lo formuló estupendamente en un artículo en el año 2014. Escribió:

 

Kreisau es el lugar en el que nació la visión de una nueva Alemania democrática.

 

El mariscal de campo pruso Helmuth Carl Bernhard, Conde de Moltke, adquirió y desarrollo esta finca después de la fundación del Reich en 1871. Como general, dirigió las tropas de las guerras de reconciliación alemanas entre 1864 y 1871 y después recibió una gran dotación al ser despedido por el Kaiser Guillermo I.

La finca fue propiedad familiar y a partir de 1929 fue administrada por Helmuth James von Moltke, quien en realidad era jurista. A principios de la guerra mundial, este fundó el llamado Kreisauer Kreis (el círculo de Kreisau), que entre los años 1942 y 1943 se reúne tres veces en esta propiedad. El objetivo de este círculo no era el de iniciar un golpe de estado violento contra el nacionalsocialismo, sino de desarrollar planes sobre cómo una nueva Alemania democrática podía existir en un estado confederado europeo.

Por esta acción, hoy en día aparentemente inofensiva, varios miembros del círculo pagaron con sus vidas. Cuando Helmuth James von Moltke fue ejecutado, dejó atrás a su joven esposa y dos niños pequeños.

Su hijo mayor falleció en 2005 después de una larga enfermedad y su hijo pequeño, Helmuth Caspar Carl von Moltke, que nació en 1937, es hoy socio de honor de la Fundación Kreisau. La fundación Kreisau fue fundada después de la caída del muro y la primavera popular en Europa central y occidental del año 1989.

Hoy en día Helmuth Caspar Carl von Moltke vive en EE.UU. y en septiembre estuvo en Kreisau para una reunión. Este fue uno de los puntos culminantes del viaje, ya que nuestro grupo pudo mantener una larga conversación con él, durante la cual nos contó muchas cosas personales sobre él y también se habló de política.

Dentro del programa de nuestro viaje también hubo otras actividades muy interesantes, como, por ejemplo, la visita a la Friedenskirche en Schweidnitz, la visita al campo de concentración de Gross-Rosen, las visitas a la ciudad de Breslavia, etc. Si describiéramos en detalle todos estos puntos, llenaríamos toda la memoria.

Pero el elemento más importante de este viaje es siempre el encuentro internacional entre grupos de la República Checa, Polonia, Bielorrusia y España. El proyecto europeo, cuyas bases hoy en día están parcialmente en peligro, no se desarrollan por sí solas, sino que deberán de ser rediseñadas por las generaciones jóvenes. Con nuestro viaje hemos contribuido a ello.

 

Henning Zeidler (Director del proyecto Viaje a Kreisau)